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Una bomba de calor es un dispositivo para calentar y mantener automáticamente una temperatura constante del agua de la piscina con unos costes mínimos. Esto es posible gracias a la utilización de fuentes de calor alternativas, como el aire calentado por el sol.
Las principales ventajas de las bombas de calor son la rentabilidad y la seguridad.
¿Por qué elegir una bomba de calor? Para calentar el agua de la piscina se pueden utilizar varios dispositivos. Entonces, ¿por qué recomendamos elegir bombas de calor? Además de la rentabilidad, que consideramos la principal ventaja, las bombas de calor presentan una serie de características positivas:
Alta eficiencia energética: las bombas de calor tienen una alta eficiencia energética en términos de consumo de energía. A partir de 1 kW de energía eléctrica, se producen entre 4,5 y 5 kW de energía térmica. Instalando una bomba de calor, su factura eléctrica no variará significativamente.
Funcionamiento a baja temperatura: las bombas de calor pueden utilizarse a bajas temperaturas. Por supuesto, deben apagarse a temperaturas bajo cero, pero es poco probable que utilice su piscina cuando la temperatura exterior sea inferior a 0 °C.
Respetuosas con el medio ambiente: las bombas de calor son respetuosas con el medio ambiente. Utilizan fuentes de energía renovables y, por tanto, no producen emisiones nocivas. Su instalación seguirá siendo respetuosa con el medio ambiente.
Compactas: las bombas de calor no son aparatos voluminosos. No necesita un espacio especial para instalarlas.
Fácil de conectar: una bomba de calor sólo necesita una conexión eléctrica e hidráulica. También pueden instalarse al construir piscinas o en piscinas ya existentes.
Fácil de mantener: las bombas de calor no requieren un mantenimiento especial, por lo que no tendrá que llamar a un manitas con regularidad. Basta con utilizarla y apagarla usted mismo si es necesario.