Vendemos e instalamos bombas de calor para calentar el agua de la piscina. Podemos instalarlas en la línea de suministro y filtración de agua de la piscina existente o por separado. Seleccionaremos una bomba de calor para los parámetros de la piscina.

Las bombas de calor extraen el calor del ambiente y lo transfieren al agua de la piscina, con lo que la calefacción resulta más barata y más respetuosa con el medio ambiente que los calentadores de agua eléctricos. Aunque el coste inicial de las bombas de calor para piscinas es más elevado, se amortiza con un importante ahorro de energía. La bomba de calor es adecuada para cualquier tipo de piscina y no necesita luz solar para calentarse, lo que permite utilizarla incluso en días fríos con temperaturas de funcionamiento a partir de 7 °C, prolongando la temporada de baño durante la mayor parte del año. El principio de funcionamiento de la bomba de calor es sencillo: aspira el aire ambiente, lo calienta por compresión y transfiere el calor al agua de la piscina, lo que permite utilizarla casi todo el año, incluso fuera de la temporada principal.
La temperatura del agua de la piscina no debe superar los 30 °C, ya que un agua más caliente puede no ser tan refrescante en verano y favorece el crecimiento de algas y bacterias amantes del calor. Además, algunos componentes de la piscina pueden tener restricciones de temperatura, por lo que los expertos aconsejan no elevar la temperatura por encima de 27-28°C.
La correcta instalación de la bomba de calor es fundamental. Debe haber suficiente espacio alrededor del aparato: al menos 100 cm desde las paredes traseras y laterales hasta los obstáculos más cercanos, y delante del ventilador de la bomba - al menos 250 cm de espacio libre, que preferiblemente esté iluminado por el sol el mayor tiempo posible durante el día.